miércoles, 10 de diciembre de 2008

Esas "saludables" fiestas navideñas y de fin de año


Quedan pocos días para sumergirnos en ese mar de sensaciones que son las fiestas navideñas y de fin de año. Nunca me gustaron, cada vez me gustan menos y a medida que pasan los años me confirman sus efectos perjudiciales sobre la salud.

Amen de los problemas que se nos puede ocurrir a todos, por los excesos que se cometen en esas fechas de todo lo consumible, están los problemas que ocasionan la contaminación acustica de esos "bellos" villancicos, esos anuncios en altavoces por las calles, las famosas campanadas o sucedaneos de ellas en las plazas y los petardos. Pero por si no fuera poco, también están ese mar de emociones que nos embriaga de la tristeza por los que no están, por los malos rollos con amigos y familia, y la agudización de la sensación de soledad.

Si estamos trabajando el pistoletazo de salidad lo proporcionan esas maravillosas comidas de empresas u organizaciones, donde el mejor de los sentimientos del día siguiente es el neutro. Cualquier cosa que no sea ese sentimiento será de arrepentimiento. ¡Se organizan comidad de navidad con el objetivo de estrechar los lazos afectivos y de amistad! y ¡oh! maravilla todos los invitados a las mismas corren despavoridos para sentarse al lado del amigo o compañero con el que comparte día a día ese lugar de trabajo. Entonces se ponen encima de la mesa los temas "permitidos" nunca los temas tabú (religión, política y otros). Comer se come poco, pero el objetivo de estrechar los lazos no se cumple ni por asomo. Sólo hay una posibilidad de estrechar los lazos y es tras la fase de cánticos regionales y exaltación de la amistad con unas copas, claro que si te pasas, puede pasarte factura, comentarios inapropiados al jefe o intentar establecer una relación con alguien que nos atrae. La cosa puede acabar en un caraoque cantando el tema "molón". Simplemente al día siguiente se produce un inmediato deterioro de la credibilidad y la autoridad, del respeto de la persona afectada.

Pero los problemas de la salud son:

-Problemas digestivos

-Problemas del estado de ánimo

-Problemas derivados del exceso de consumo de sustancias adictivas

-Problemas derivados de la contaminación acústica

¡Ah! Cuidado con las uvas o cualquiera de los rituales "del deseo de buen año nuevo".

Entre otros. Hoy además la Asociación para el Autocuidado de la Salud, según recoge una nota de prensa de Europa Press habal de algunos de estos problemas de salud y en lugar de mensajes de evitar los excesos habla de la utilización de fármacos para aliviar los síntomas que se producen por los excesos. La verdadera prevención está en sean o no fiestas navideñas evitar todos los excesos. Y no será necesaria la utilización de fármacos para combatir los síntomas que nos producen ¡Unas fiestas navideñas y de fin de año saludables para todos! ¡A ver si es verdad!

José María Vergeles Blanca

Médico de Familia

1 comentario:

Anónimo dijo...

José María, te aseguro que una solución es la Noche Vieja en el desierto tunecino: ¡no tienes que dar ninguna explicación de porque no vas a una fiesta o cena!